El periodista brasileño Mario Vitor Santos, de paso por nuestro país, encabezó una charla abierta en el Instituto Patria, para conversar junto a un grupo de dirigentes, militantes políticos y periodistas sobre la realidad política y económica de su país, en el que gobierna Jair Bolsonaro y Lula Da Silva es un preso político.

La presentación de la actividad estuvo a cargo del ex embajador del Estado Plurinacional de Bolivia durante el segundo mandato presidencial de Cristina Fernández de Kirchner, e integrante de la Comisión de Integración Regional y Asuntos Internacionales, Ariel Basteiro.

Lo primero que señaló Santos fue que para él era “muy Importante poder hablar con personas involucradas en la política local”, entre los que había integrantes de la comisión de Integración Regional y Asuntos Internacionales, de la que también forma parte Basteiro. “Para nosotros la victoria de Alberto es también nuestra, de Lula, del Partido de los Trabajadores (PT), de la izquierda brasileña”, celebró el periodista.

Santos habló de una “conexión entre vuestra realidad y la nuestra, en todo sentido”. En lo económico, dijo que nuestro país depende mucho de lo que allí suceda, como así también de la capacidad de Bolsonaro de “sostener su gobernabilidad”. Advirtió “no es bueno el pronóstico para la economía brasileña para lo que queda del año, y lo mismo con el que viene”, ya que se espera que “se crezca solo un 1 por ciento, suba el desempleo y no habrá inversiones porque los capitales internacionales desconfían de la sustentabilidad de nuestra economía”. En ese sentido, aclaró que “tampoco es favorable la situación política e ideológica” que sintetiza el gobierno de Bolsonaro, quien en el último tiempo tuvo varios problemas diplomáticos con países europeos.

El ex secretario de redacción del diario Folha y columnista del medio Brasil247, insistió sobre la estratégica e histórica relación entre la Argentina y Brasil. “El gobierno de Alberto Fernández dependerá en buena parte de lo que suceda en Brasil”, advirtió, y a su vez remarcó que “muchos brasileros miran con esperanza el tiempo nuevo que se abre en vuestro país”, ya que “estamos ante una derrota histórica del neoliberalismo mundial, y lo mismo puede pasar en Brasil en el futuro”.

“Argentina es el futuro de Brasil, y viceversa. Uno por la economía, y el otro por la política”, graficó Santos, y una de las asistentes puso el ejemplo de un baile de tango, ante lo cual él acudió a la samba como contraejemplo. Un tercero saldó el intercambio con el ejemplo de la capoeira, en la que se complementan lucha y danza.

“Lo que ocurrió aquí en la Argentina es una sabiduría que en parte se inspiró en lo que nos sucedió a nosotros en Brasil”, sostuvo Santos en relación a la victoria del Frente de Todos en las PASO del pasado 11/8. “Se trató de una ingeniería admirable”, señaló.

En relación al plano económico, Mario denunció que Bolsonario está “destruyendo la economía nacional”, y contó que el pasado 3/9, “el senado nacional aprobó la venta de todo el presal brasileño, que contiene unos seis mil millones de barriles de petróleo y gas, por una cifra irrisoria, de un diez por ciento de su valor, aproximadamente”. Aparte, mencionó la reforma jubilatoria que impulsa el gobierno, “basada en cálculos fraudulentos, y que mantiene todos los privilegios de las clases dominantes y que suprime los derechos de los más necesitados”. Denunció que, de modo irremediable, “la desigualdad en nuestro país va a aumentar” y que no se diseñará ninguna política pública para hacerle frente a ese flagelo.

Santos señaló que en Brasil “se están aplicando todas las recetas del neoliberalismo” y que “Macri fue una especie de laboratorio infame de los remedios que se aplican en Brasil”. Apuntó que “si Macri fracasó en Argentina, como sucedió, Bolsonaro también fracasará, y lo vamos a ver en las elecciones municipales de 2020, para las que Bolsonaro no tiene candidatos ni en Río ni San Pablo”. Con respecto a las mediciones de popularidad, dijo que “la caída de Bolsonaro es lenta y segura” y que “su imagen positiva decae todos los días (hoy está en un 23 por ciento)”.

Con respecto a Lula Da Silva, hoy preso político del régimen de Bolsonario y el ministro de Justicia, Sergio Moro, el periodista contó que “continúa con la mejor imagen del país, con unos 50 puntos”, y que por eso “lo mantienen preso”. Denunció que allá lo que hubo fue un “golpe de Estado mediático y jurídico, gestado en los grandes medios, que desde el primer día de gobierno del PT, allá en 2002, buscaron alternativas para sabotear al gobierno”, un hecho que solo lograrían materializar “con la operación de Lavajato, durante el primer gobierno de Dilma Rousseff.

Por último, y en relación a las posibilidades de que el ex metalúrgico y presidente de su país, recupere su libertad, Mario contó que se barajan tres posibilidades. El avance del pedido de suspensión del juez de la causa y ministro de gobierno, Moro, sospechado de arbitrariedades manifiestas. La segunda, que la condena del tribunal de segunda instancia todavía no está firme por la Corte Suprema, y la tercera, que la pena está cumplida, y debe recuperar de modo inmediato su libertad.

Los asuntos políticos, económicos, sociales, culturales y periodísticas de las naciones que componen la Patria Grande, son parte de la agenda ineludible del Instituto, y estos encuentros se realizan con ese sentido.