Arroyo ponderó el espíritu federal que tendrá el gobierno del Frente de Todos.

Durante la tarde del martes 15/10, el diputado nacional y referente en políticas sociales, Daniel Arroyo, encabezó en el Instituto Patria una reunión de trabajo junto a representantes de sindicatos, organizaciones políticas y sociales, referentes de universidades y organizaciones no gubernamentales, con el objetivo de comenzar a delinear, en conjunto, las políticas públicas que deberá implementar el Frente de Todos, a partir del 10 de diciembre, para enfrentar la catástrofe social que deja como herencia la Alianza Cambiemos, con el flagelo del hambre como su peor cara.

La reunión fue masiva y fue organizada por la Comisión de Inclusión y Desarrollo Social del Instituto Patria. Aparte de Arroyo, participaron la diputada nacional Laura Alonso; dos integrantes del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) y la responsable de la Comisión de Inclusión y Desarrollo Social del Patria, Laura Berardo. A su alrededor tomaron asiento –y unos cuentos quedaron de pie- los representantes e integrantes de las organizaciones.

“Creo profundamente en el cruce entre la academia y la gestión del Estado, ya que necesitamos sumar experiencias teóricas y prácticas durante en los 56 día que nos quedan hasta las 10 de la mañana del 10 de diciembre, cuando comencemos a gobernar”, afirmó Arroyo en el comienzo de su intervención.

El diputado nacional propuso un esquema de cinco dimensiones para pensar y trabajar en conjunto, la política, las organizaciones y la academia, de cara al 10 de diciembre: qué políticas hay que implementar para frenar el desplome de los índices de pobreza e indigencia; cómo establecer un piso de derechos y ciudadanía para evitar, por ejemplo, que en la Argentina haya hambre; cómo se vuelve a generar trabajo para las mayorías; cómo se construyen y consolidan las políticas denominadas de segunda generación, que son aquellas referidas a la niñez y adolescencia, género, trata de personas, discapacidad; y por último, cómo se hace para achicar la brecha de desigualdad que azota a la Argentina.

Paso seguido, Arroyo profundizó en cada uno de los ejes. Sostuvo que es inadmisible pensar en una política social “si las mayorías no acceden a una canasta básica de alimentos”, o no se le busca una salida al “endeudamiento que hoy sufren millones de familias”. Señaló, aparte, que hay que “proteger de manera urgente a los jóvenes y las mujeres” que trabajan, entre otros rubros, en la industria textil, porque está claro que “la salida no es un servicio cívico con la Gendarmería”, como impulsa el Gobierno. “Es una vergüenza que haya hambre en la Argentina”, apuntó, y dijo que “se pasó un límite que en la Argentina no podemos tolerar”.

Arroyo puso sobre la mesa cinco ejes para pensar y trabajar en conjunto.

La coordinadora general de las comisiones del Patria, Claudia Bernazza, a cargo la apertura de la actividad, contó que el instituto ya realizó un encuentro conversatorio con el CIPPEC “para intercambiar saberes entre ambas instituciones”, en el agosto pasado, y el Congreso de la Nación, con el objetivo de debatir y reflexionar sobre los modelos de Estado para el desarrollo con inclusión, y en ese marco, en particular, para hacer foco sobre las políticas educativas. “Ahora decidimos realizar este segundo encuentro, teniendo en cuenta el gravísimo contexto de crisis económica y social generada por las políticas neoliberales de Cambiemos”, contextualizó.

Por su parte, la coordinadora de la Comisión de Desarrollo e Inclusión Social del Patria, Laura Berardo, destacó que “el gran desafío para reconstruir el tejido social que desarticuló Cambiemos, es generar políticas que permitan recuperar el trabajo y el protagonismo del Estado, como así también la intervención en las relaciones sociales y económicas, y en el proceso de redistribución de la riqueza”. También señaló que “en términos estratégicos hay que atender las urgencias –la alimentaria, la laboral- pero no perder de vista que la directriz de las políticas sociales deben ser los derechos y la construcción de relaciones igualitarias”.

Del encuentro participó el referente de la FETRAES, Eduardo Montes; la diputada de la provincia de Buenos Aires, Mariana Larroque; el ex secretario de la SEDRONAR, Gabriel Lerner; la decana de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, Carolina Mena; el referente del Partido Piquetero, Julián Marino; el Frente Barrial de la CTA; representantes del Colegio de Trabajadores Sociales; integrantes de la Generación Evo y del Peronismo Militante; representantes del Instituto Cafiero; e integrantes de las comisiones de Salud, Hábitat y Relaciones Internacionales del Patria, entre otros referentes y espacios políticos, sociales, gremiales y académicos abocados a la tarea social.

La diputada nacional y referente del área de Educación, Laura Alonso ponderó que “nuestro candidato a presidente haya sido absolutamente claro cuando lanzó una convocatoria, junto a todos los sectores de la sociedad, para erradicar el hambre de la Argentina”, aunque advirtió que “eso no nos tiene que hacer perder de vista las cuestiones de mediano y largo plazo, cuestiones estratégicas y parte de una deuda de la democracia, como es trabajar por la reducción real de la desigualdad social”, uno de los asuntos sobre los que “vamos a tener que trabajar en el próximo gobierno, por medio de acción articulada e integral de parte del Estado”.

Alonso llamó a trabajar de manera integral para achicar la brecha de la desigualdad.

La representante del CIPPEC, Gala Díaz Langou realizó un diagnóstico no solo de la actual coyuntura social de la Argentina, sino también de las últimas décadas, y afirmó que “con el próximo gobierno se deberá crecer pero también habrá que implementar políticas redistributivas, ya que aunque se creciese un tres por ciento anual, durante tres años consecutivos, la pobreza seguiría muy alto, en alrededor del 26%”. La acompañó su colega Vanesa D’Alessandre.

En el cierre de su intervención, y antes de darle lugar a la voz de los representantes de los distintos sectores que participaron del encuentro, Arroyo destacó que a pesar del el complejísimo escenario económico y social que el Frente de Todos deberá enfrentar cuando asuma su gestión de gobierno, es optimista, ya que en la actualidad, el campo nacional y popular cuenta con “más Estado y más sociedad civil” para encarar posibles soluciones, porque durante las experiencias realizadas en los últimos años “todos aprendimos cómo gestionar y extender las políticas sociales”, porque “vamos hacia un gobierno federal con un fuerte desarrollo local” y ya que en definitiva “la reconstrucción del país se realizará desde abajo, articulando con las 7 regiones, las 24 provincias y los 2.200 municipios”.