Durante la lluviosa tarde del miércoles 12/06, la Comisión Mujer y Género del Instituto Patria organizó, junto al Frente Cultural Peronista (FCP), la primera edición del “Ciclo Eva Perón de Feminismo, Arte y Cultura”, por medio de una actividad que contó con la presencia de escritoras, poetas y talleriastas de propuestas literatiras para personas privadas de su libertad. El encuentro se realizó a sala llena y las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de Judith Said, responsable de la comisión Mujer.

Natasha Deligiannis, poeta y parte de la Secretaría de Género del FCP, estuvo a cargo de la moderación de la actividad, y luego de contar que el objetivo del ciclo es “establecer puntos de contacto entre el feminismo y las distintas ramas del arte”, advirtió que si bien “no es nuestra intención polemizar sobre si Evita era o no feminista”, aclaró que “para nosotras Evita fue feminista en los hechos”, ya que entre otras iniciativas muy disruptivas para su época, “lanzó el Partido Peronista Femenino, impulsó el voto femenino y mostró que las mujeres podemos participar de todos los ámbitos, como los varones”.  Por eso, aclaró, “hoy recogemos su legado, tomando las calles, militando, como ella, por la justicia social, y proponemos también avanzar en el plano de la cultura y el arte”.

Natasha es fundadora del colectivo Poetas Peronistas.

Las invitadas para formar parte del panel fueron la escritora y periodista especializada en crítica literaria, Gabriela Borrelli Azara; la poeta y parte del colectivo Yo no fui que realiza talleres de literatura en distintos penales de la provincia de Buenos Aires, Liliana  Cabrera; el escritor Marcelo Figueras también figuraba en el volante de la convocatoria, pero no pudo estar debido a que quedó varado en Santiago del Estero, luego de acompañar a Cristina Fernández de Kirchner realizó de su libro Sinceramente, por problemas  climáticos.

Judith entonces, en su nombre, contó que citaría parte del texto que Figueras publicó en el portal Cohete a la luna, luego de la  presentación de Sinceramente en la Feria del Libro de la Ciudad de Buenos Aires, llamado “Palabras perfectas”. Leyó: “… lo vengo diciendo hace rato, tanto a través de textos como por la radio: en este mundo de hoy los mejores escritores, tanto afuera (pienso en Jennifer Egan, en Lorrie Moore, en Rachel Kushner, en Karen Russell, en Dana Spiotta, en Karen Atkinson — por mencionar apenas seis entre miles) como acá (pienso en Enríquez, Schweblin, Piñeiro, Cabezón Cámara, Guerriero y seguirían las firmas hasta el amanecer), son escritoras, che. Y están cambiando el mundo para mejor, de a un libro por vez. Sinceramente”.

Judith Said es la coordinadora de la comisión Mujer y Géneros del Instituto.

Después de los aplausos, Flavia Vitale, docente y militante feminista, leyó el poema “Al rencor”, de Silvina Ocampo. Se trató del primero de varios que se leerían, con la cadencia y música de la poesía, durante la actividad.

Lliliana Cabrera, con el pañuelo verde de la campaña nacional por el aborto legal, seguro y gratuito atado a la muñeca, y una mirada que delataba la timidez de saberse sentada frente a un micrófono, contó que estuvo ocho años presa en el penal de Ezeiza, y que “ahí tuve la oportunidad de cruzarme con un taller de poesía”, el mismo que “hoy me encuentro dando yo”. En seguida, los aplausos llenaron el auditorio y a la poeta se le humedecieron los ojos.  “Eso para mí es una piedra fundamental, porque me dio la posibilidad de hacer con la vida un proyecto distinto a las razones que me llevaron al penal”, explicó.

Cabrera contó que “hoy vengo en representación del colectivo feminista ‘Yo no fui’, que trabaja dentro y fuera de los penales de mujeres, con mujeres y cuerpas disidentes, y no binaries, y que el feminismo fue otro de los enormes hallazgos que encontró por medio del taller. “Estamos muy contentas de poder venir acá a contar nuestra experiencia”,  completó, y avisó que iría hilando su relato con algunos poemas.

Leyó tres. Frases y palabras cargadas con una notable carga de violencia, rebeldía y belleza.

Liliana estuvo privada de su libertad. Un taller de poesía le cambió la vida y la acercó al feminismo.

“Yo tenía mucho miedo de salir en libertad, porque afuera no tenía familia ni contención, y las compañeras de ‘Yo no fui’ –y otra vez se le anudó la garganta- han sido mi familia. Por eso muchas de las compañeras del colectivo esperamos a las que siguen adentro”, contó, y agregó que otros de los trabajos que realizan con las mujeres privadas de su libertad es “trabajar con sus causas, ya que los tiempos judiciales son muy largos, y muchas veces tienen que ver con el humor social”.

Las poetas y militantes feministas Lia Ghara y Paula Jiménez España también leyeron un par de poemas, para darle más carnadura aún a la consigna del ciclo, que propone cruzar al feminismo y el peronismo con la cultura.

La escritora y conductora del programa Lecturas Feministas de la radio FutuRock, Borrelli, arrancó su intervención lamentando la ausencia de su colega Figueras, porque quería discutir con él, ya que dice que los mejores escritores del país, en este momento, son mujeres, y yo subo la apuesta, de jodida que soy, y digo que las mejores escritoras argentinas, las más vanguardistas, son peronistas y han sido escondidas”.

La autora entonces dedicó varios minutos para recuperar de la historia a dos autoras, peronistas, feministas, que fueron invisibilizadas por la gran prensa y la crítica literaria. Antes, ponderó la publicación de Sinceramente, el texto biográfico de la compañera Cristina Fernández de Kirchner, ya que de esa manera “la literatura vuelve a ser un elemento de acción política”.

Durante el encuentro se leyeron varios poemas.

Borrelli dijo que en la historia de la literatura, “podemos rastrear fuera de la serie de escritoras con nombres de estaciones de subte, una serie feminista, que con esa clave quisieron entender el 55 y también sus consecuencias, la violencia y sus reacciones, y nos sirve ahora para pensar este presente que se vuelve cada vez más surrealista”. Y mencionó dos textos: Río de las Congojas, de Libertad Demitrópulos y Las primas, de Aurora Venturini.

“Mi propuesta es que esta marea reivindique a las Demitrópulos y Venturinis en sus contradicciones y literaturas nuevas”, dijo la escritora, “que han publicado novelas que nos hacen pensar en la historia, cuando el neoliberalismo nos quiere hacer olvidar cómo se fundó esta ciudad y qué cuerpos estuvieron en juego en esa fundación”, para entender, cerró, “al 17 de octubre como una nueva refundación de la Patria”.

Tanto Demitrópulos como Venturini escribieron sobre Evita. La primera la publicó una biografía, en 1984, con el Centro Editor de América Latina, y la segunda publicó, en 2014, la novela «Eva, alfa y omega», por medio de la editorial Sudamericana, en la que se narra su relación con la Abanderada de las Humildes, por medio de un texto autobiográfico.