A 71 años de la creación de la Fundación Eva Perón, desde la Comisión Mujer y Géneros transcribimos las palabras de homenaje de la compañera diputada nacional Cristina Álvarez Rodríguez, y directora AD Honoren del Museo Evita.

Ya lo decía el General Perón: “Mientras yo construía la casa grande que nos iba a cobijar a todos, Eva abrigaba a los que estaban afuera para que no se murieran de frío esperando para entrar”.

Esos ladrillos que ponía Perón eran los cimientos de la nueva Gran Argentina, y ella se encargó de hacer de la política un acto de amor.

La Fundación fue una de las principales insignias de la lucha por la justicia social. Se crearon hospitales, escuelas, barrios obreros, hogares de niños y para mujeres en riesgo. ‪También se conquistaron derechos: para la mujer (voto, igualdad jurídica en el matrimonio, patria potestad), para el trabajador, la ancianidad y la familia.

Desde la Fundación se respondían infinidad de pedidos y cartas de todo el país: sillas de ruedas, máquinas de coser, juguetes, zapatos, bicicletas. La ayuda social directa era uno de los pilares del proyecto.

Dijo Evita: “No es filantropía, ni es caridad, ni es limosna, ni es solidaridad social, ni es beneficencia. Ni siquiera es ayuda social, aunque, por darle un nombre aproximado, yo le he puesto ése. Para mí es ESTRICTAMENTE JUSTICIA”.

La Fundación fue una demostración más del amor de Evita por su Pueblo.

A 71 años de su creación y a 100 del nacimiento de Eva, nuestro mayor homenaje es retomar su legado y construir nuevamente la Argentina justa e inclusiva que queremos.